No a la cotización como autónomo por decreto de la UPTA

La actividad económica ilegal derivada de la economía sumergida, promovida por las empresas en la mayor parte de los casos, no se normaliza cargando en las espaldas de las trabajadoras y trabajadores el peso de la cotización en la Seguridad Social, como pretende la UPTA.

La aspiración de la Unión de Profesionales Trabajadores Autónomos (UPTA) de crear un sistema adicional de cotización al RETA que “daría seguridad jurídica a los colectivos profesionales no legalizados”, no protege ni sirve a artistas o músicos, como señala la organización de autónomos.

El 90% del colectivo de los músicos y artistas son trabajadores por cuenta ajena y desarrollan su actividad diaria de forma ilegal pues son obligados a trabajar sin contrato, sin alta en la Seguridad Social y, cuando les pagan, tienen que cobrar en dinero negro. Que la UPTA intente regular el trabajo por cuenta ajena de músicos y artistas, convirtiendo a estos en trabajadores autónomos, delata que no conoce las características del sector, así como la norma legal que determina como relación laboral de carácter especial la de los artistas en los espectáculos públicos. La medida propuesta por UPTA, que tiene como único objetivo traspasar otra nueva responsabilidad del empleador a los trabajadores, solo traerá más precarización.

En la industria de la música en vivo, sólo hay un modo de “legalizar”, tal y como pretende UPTA, la parte correspondiente del millón de empleos de la economía sumergida del que habla la organización de autónomos. Y ese es que las empresas, privadas y públicas, cumplan, precisamente, con la ley vigente marcada actualmente por el Estatuto de los Trabajadores y el Convenio Colectivo

Junta de Gobierno

Coordinadora Sindical de Trabajadores/as Músicos (CST-Músicos)

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